Como te ven, te contratan...

Todos hemos escuchado la frase 'Como te ven, te tratan' y a la mayoría de nosotros nos resulta un poco frívolo juzgar solamente por la apariencia, pero debemos aceptar lo que una buena imagen puede lograr: que una venta se genere, lograr cerrar un trato, que las personas confíen en ti, la contratación inmediata, mayor aceptación, mejor trato, mayores preferencias, mejor servicio, mejores lugares, primeras entradas al club, etc.

Resulta un poco incómodo e injusto cuando no somos favorecidos, pero debemos recordar que así es y así ha sido siempre a lo largo de toda nuestra vida. Somos una especie selectiva por naturaleza y hemos sido educados (o mal educados) en conceptos de belleza, moda, arte, música, lo bonito y lo feo, lo bueno y lo malo. Conceptos que quizá rayen en lo absurdo, complejo o radical, pero también nos han enseñado que si tenemos libertad de elección y libre albedrío, entonces, por qué no escoger lo mejor? Por qué no escoger lo que mejor nos parezca?

La primera impresión es la que cuenta.

Hace unos días veía algunos blogs que hacen referencia al tipo de ropa adecuado para las entrevistas, he leído libros que te explican cómo verte bien para vender, como debes vestir correctamente para la oficina, etc. Es muy cierto que en el mundo laboral esto tiene un efecto positivo y mayor efectividad a la hora de negociar, sin embargo, yo mencionaría 3 aspectos importantes para lograr una imagen integral de la persona:

a) Pulcritud (en todos los sentidos);

b) Lenguaje (escrito, verbal y corporal); y,

c) Educación (preparación).

Estos aspectos se pueden traducir en más y mayores logros y éxitos.

Hoy en día los reclutadores se pelean por encontrar los mejores candidatos y para lograrlo, muchos factores entran al juego. Particularmente la primera impresión. Crear empatía entre reclutador y candidato y no, no se trata de entablar una amistad y/o encontrar una afinidad en común, pero si en lograr esa primera impresión que transmite confianza, seguridad en sí mismo, educación y compromiso para que el reclutador se sienta seguro de lo que está gestando.

Se han hecho miles de estudios, escritos, libros, y blogs al respecto y todos coinciden que las personas más atractivas (y esto no se refiere solamente a sus rasgos físicos, sino a la forma en que se visten) son consideradas más inteligentes, sanas y con mayores capacidades sociales que el resto. De allí que las oportunidades que reciban para prosperar en lo profesional sean también mejores que las de quienes no ponen cuidado en esos detalles.

"Lo que uses es la tarjeta de presentación ante el mundo, sobre todo hoy, cuando los contactos humanos son tan rápidos. La moda es el lenguaje instantáneo".

Miuccia Bianchi Prada

¿Entonces, debo vestirme bien para tener éxito laboral?

Sí, pero no solo eso. Debemos admitir que no todos tenemos o hemos logrado ese éxito porque sabemos que tenemos algunas debilidades o limitaciones, gustos o preferencias. Y no, no vamos a tratar de enseñarte a cómo vestir, peinar ni mucho menos a hablar, mi experiencia dista mucho de hacerlo y para ello existen cientos de profesionales que pueden ayudarte en asesoría de imagen. Pero si puedo darte algunas pautas que puedes considerar y analices resolver según tu debilidad, limitación, gusto o preferencia se trate.

Estamos claros que vivimos en una sociedad con reglas y normas, con códigos de vestimenta y buen gusto. Por ello, la imagen resulta una verdadera área de oportunidad para todos aquellos que, más que preocuparse por lo que dirán los demás, saben que tener éxito en esa área, puede impactar en el desarrollo de su carrera profesional.

Desde el punto de vista de la Mercadotecnia, en el mundo de los negocios, eres un producto que constantemente está vendiendo “algo”. Ese “algo” se llama imagen.

La proyección de tu imagen adquiere un carácter poderoso, cuyo origen es el interior de tu persona. Esa proyección se refleja en tu actitud y de ésta, dependerá la eficiencia del mensaje, sea positivo o negativo, que consciente o inconscientemente comunicas a los demás.

En el libro Las 48 Leyes del Poder, de Robert Green y Joost Elffers se enuncia la Ley no. 6.

Busque llamar la atención a cualquier precio.

‘Todo es juzgado por su apariencia, lo que no se ve no se cuenta… Conviértase en un imán que concentre la atención de demás, mostrándose más grande, más atractivo y más misterioso que la gran masa, tímida y anodina. ‘

Ten en cuenta que no importan tus tendencias y gustos por la moda: de la vieja escuela, tradicional, conservador, trendy, fashionista, hipster o cuál sea tu moda, ante todo debes ser pulcro. La pulcritud no es otra cosa más que la limpieza y el cuidado que se tiene con cualquier detalle, y esto aplica a nuestra imagen personal, nuestros objetos personales, nuestro lugar de trabajo, nuestros hábitos de higiene, de orden y puntualidad. Ninguna empresa va a querer verse representada por alguien que no es pulcro, porque la impresión que dan es que la persona y la empresa comparten las mismas carencias.

Y no, no basta con tener esa imagen ideal y hasta cierto punto, envidiable. Complementa tu persona con una mejor dicción y vocabulario acorde a tu imagen, el saber expresarse correctamente te permite exponer claramente tus ideas, tus metas y tus objetivos. Lee con más frecuencia, pues eso te dará elocuencia y temas de conversación. Corrige tu ortografía pues no hay nada más ofensivo que un ‘profesional’ que no sabe hablar ni escribir correctamente. Si quieres ser el centro de la atención completa, aprende a comunicarte.

Mantén tu mente ocupada diversificando tus actividades, haz deporte, practica algún hobbie, (si te hace ganar dinero, mejor). Sé proactivo en tu comunidad, en tu hogar y en tu empleo actual. Aprende a dirigir equipos de trabajo, involúcrate en actividades que pongan en reto tus habilidades. Mantenerte activo y ocupado te hace destacar por sobre los demás pues añades una cualidad que pocos poseen: liderazgo.

Busca dentro de ti, cuáles son tus oportunidades de mejora y trabaja en ello. Olvida los estereotipos que nos han creado y busca resaltar lo mejor que hay en ti y que no necesariamente te implica gastar una fortuna. Hoy en día existen cientos de artículos al respecto de una buena imagen, de la forma de vestir, los cortes y peinados adecuados para la ocasión, consejos para un guardarropa exitoso. No desestimes el poder de la imagen y busca qué es lo que te hace sentirte bien contigo mismo. Esa es la base para lograr el éxito inmediato.