Sobrevive a tu primera entrevista de trabajo

¿Conseguiste una entrevista de trabajo? ¿Sí? ¡Felicidades! Has logrado destacar entre centenares de candidatos. Ahora, viene un gran momento: la primera entrevista de trabajo.

 Infórmate sobre la empresa y el puesto de trabajo que ofrecen (vuelve a mirar la oferta de trabajo: ¿Qué requerimientos solicitan al candidato?). Contra más sepas sobre el tipo de puesto, más y mejor podrás preparar la entrevista.

 

- Identifica los 3 requisitos principales del puesto de trabajo. Para ello, reflexiona ¿Qué resultados esperan obtener de la persona que se incorpora? ¿Qué crees que es importante para conseguir estos los resultados?

 

- Identifica y demuestra tu valor añadido para el puesto de trabajo. Date cuenta, cuáles de tus habilidades, conocimientos y/o experiencia avalan los 3 requisitos que has identificados en el punto 2. Y, gana credibilidad, encontrando varios logros que demuestren lo que estás diciendo. Por ejemplo, si un requisito principal del puesto es estar orientado a resultados y, tú tienes esta habilidad, demuéstralo explicando cómo aumentaste en tiempo récord las ventas de tu área.

 

- Prepara las preguntas “típicas” de toda primera entrevista. Piensa qué responder en las siguientes preguntas:

¿Tus tres fortalezas? Responde las del punto 3: tu valor añadido.

¿Tus tres defectos? No descubras aspectos que puedan descartarte de la posición. Por ejemplo, no digas que no sabes suficiente sobre algo que piden, o que eres muy despistado si el puesto requiere mucha atención.

¿Por qué quieres trabajar con nosotros? Es importante transmitir cómo es tu trabajo ideal y describir aquello que te gusta, no sólo del puesto, sino de la empresa.

Recuerda, que a todos nos gusta oír lo bueno que somos y cuanto quieren estar con nosotros.

- Ensaya y ensaya. Es importante que además de preparar el contenido, ensayes para mostrar una actitud natural, cercana (sonríe, por favor), interesada por el puesto (haz preguntas para obtener más información sobre la empresa, la estructura el departamento, los proyectos principales que se están llevando a cabo) y comprometida con lo que ofrecen.

¿Cuándo conviene cambiar de empleo?

En ocasiones, cambiar de trabajo puede resultar beneficioso, sobre todo si otra compañía le ofrece mejores condiciones, sueldo o posibilidades de ascenso.  

Sin embargo, hay circunstancias donde no se puede tomar con facilidad dicha decisión y donde se debe sopesar mucho los pros y los contras, ya que se conocen casos de personas quienes sin reflexionar mucho al respecto han cambian apresuradamente de trabajo para luego arrepentirse de ello.  

La pregunta, entonces, es ¿Cuándo conviene cambiar de empleo?.

En este sentido, recomendamos que, antes de tomar una decisión, es importante valorar los siguientes aspectos:   

Cuando no cambiar

Si una persona está pasando por algún tipo de crisis personal (divorcio, pérdida de un ser querido, dificultades legales, etc.) le resultará difícil y emocionalmente agotador pasar por la etapa de adaptación inherente a un nuevo trabajo y, a la vez, lidiar con sus problemas personales.

Si le acaban de dar un ascenso en la compañía donde trabaja en la actualidad significa que le han tomado en cuenta por su capacidad y habilidades y es probable que, en un futuro, le consideren para posiciones mejores.   No tendría, entonces, sentido cambiar de empleo.

Si la situación económica del país no es buena, cambiar de trabajo puede representar un gran riesgo, ya que si no se siente bien en el nuevo puesto, será más difícil encontrar un tercero    Por ello, se recomienda no cambiar de trabajo en época  de recesión económica a menos que se tenga una razón muy poderosa para irse.

Si la nueva empresa está ofreciendo sueldo, posibilidades y condiciones de trabajo muy similares a lo que se tiene, entonces, en ese caso se estaría dando un paso lateral en vez de hacia adelante, y no merecía la pena renunciar al empleo actual y comenzar de nuevo en otro.  La única excepción seria que el puesto ofrecido estuviera en un campo (o compañía) donde siempre se ha deseado trabajar.

Si la otra empresa ofrece un mejor sueldo, pero las condiciones de trabajo son peores o la empresa está en un giro que no le agrada a usted, es mejor ganar un poquito menos y sentirse a gusto que ganar más y detestar el trabajo.

Cuando sí cambiar

Si el actual empleo no lo deja avanzar hacia sus metas ni le ofrece perspectivas a corto, mediano o  largo plazo, es mejor cambiar a otro empleo que le ponga en un camino más claro.

Si existen cambios en la estructura organizacional donde se observe despidos masivos de personal, es mejor considerar la opción de otro empleo.

Si la empresa está pasando por serios o graves problemas económicos y puede observarse en el horizonte un probable cierre o quiebra, es mejor aceptar otro empleo.

Si usted se encuentra ejerciendo una posición por años donde ha realizado tareas que no le gusta, pero le han prometido que esa situación cambiará y pasa el tiempo y no lo ve, es mejor cambiarse de empleo.

Si observa que sus compañeros y jefes critican el trabajo realizado por usted cuando antes lo elogiaban y se muestran distantes, fríos y hasta algo groseros cuando antes eran amables y simpáticos es síntoma que tal vez desean prescindir de sus servicios y sería mejor evaluar la posibilidad de aceptar el otro trabajo.

¿Cómo conseguir trabajo sin tener experiencia laboral?

Quienes no tienen experiencia laboral son quienes más problemas tienen para acceder a un puesto de trabajo, pero mientras no puedan trabajar no tendrán experiencia laboral que demostrar. Por ello resulta tan importante salir de ese círculo en el que se encuentran sobre todo muchos jóvenes sin empleo. Continúa leyendo si quieres saber algunas pautas sobre cómo conseguir trabajo sin tener experiencia laboral.

Formación

Si no puedes demostrar lo que sabes hacer mediante tu experiencia laboral anterior, al menos puedes acreditar lo que te han enseñado a hacer, ya sea en la Universidad, en un máster, un ciclo o un curso privado. Cuanto más te especialices más posibilidades tendrás de conseguir un empleo, ya que la clave muchas veces para destacar entre cientos de candidaturas de empleo es ser experto en un nicho profesional muy concreto, o una rama muy específica dentro de tu sector.

Contactos

Un responsable de recursos humanos que vea tu currículum sin conocerte se hará solo una idea muy remota de quién eres realmente. Sin embargo, si previamente te conoce y sabe de tus aptitudes o capacidades personales será más fácil que te contrate o que te recomiende. Es muy importante ir ampliando poco a poco tu red de contactos.

Haz trabajo de detective para buscar tu empleo

Si no puedes o no quieres montar un negocio propio, no te quedará otra que buscar un empleador que quiera contratarte. Y en este sentido Internet será tu mejor aliado. Programa búsquedas diarias de empleo en los distintos portales especializados o sigue estos otros consejos para buscar empleo, busca en redes sociales y no dejes de formarte mientras tanto. Tómatelo como un trabajo, dedícale un tiempo fijo al día y no te desanimes.

Preparar un buen CV

Una parte fundamental para encontrar trabajo se centra en redactar un buen CV.

Cómo utilizar la solicitud de empleo para redactar CV

La solicitud de empleo es un formato universal muy utilizado en el medio laboral para iniciar un proceso de selección para un puesto. En algunos casos sustituye al CV y en otros lo complementa. Es decir, habrá empresas que no te pidan CV sino esa solicitud, y otras que además de tu CV, te pidan esta forma.

Si nunca he hecho un CV ¿Me sirve la información de una solicitud de empleo? ¡Absolutamente! A continuación te mostramos las secciones que puedes utilizar para tu CV y las que debes omitir.

1. Fotografía. Una buena foto puede darle personalidad a tu Currículum, sin duda puedes incluirla en tu CV, siempre y cuando sea formal.

2. Datos Personales. En la solicitud se incluyen más datos personales de los necesarios para el CV, en este último basta con tu nombre, teléfono y correo electrónico.

3. Documentación. Los datos de tu CURP, número de seguro social, RFC o Afore no es relevante en tu CV así que omítela. Si avanza tu proceso el reclutador te la pedirá.

4. Estado de salud. En tu CV no es necesario, la mayoría de las empresas solicitan exámenes médicos más adelante.

5. Datos Familiares. Definitivamente déjalos fuera de tu CV.

6. Escolaridad. En el currículum interesa solo tu último grado de estudios, se considera un grave error de CV incluir datos académicos adicionales.

Mejor deja fuera.

7. Escolaridad. En el currículum interesa solo tu último grado de estudios, se considera un grave error de CV incluir datos académicos adicionales.

8. Conocimientos generales. En la parte final de tu CV es buena idea poner una sección llamada Conocimientos y Habilidades, incluye idiomas y programas de cómputo que manejas.

Sí, pero...

9. Referencias personales. Generalmente las referencias se solicitan cuando el proceso de selección avanza a tu favor, en el currículum no se recomienda ponerlas.

10. Datos generales y económicos. El currículum es para hablar de tu perfil profesional, estos datos podrá preguntarlos el reclutador en la entrevista, pero no los incluyas en el CV.

5 consejos para mostrar seguridad en tu entrevista de trabaj

Cuando estamos en el proceso de profesionalización no nos imaginamos cómo es el mundo que nos espera allá afuera. Las primeras entrevistas de trabajo son difíciles para todos, incluso hay personas que jamás se sienten lo suficientemente seguras en ninguna entrevista.

Algunos consejos para mostrarte con más confianza son:

1. Mantener el cuerpo recto y el contacto visual

Esto funciona muy bien para los que son muy tímidos ya que si te mantienes encorvado, relajado o con la mirada distraída, tu entrevistador percibirá sentimientos de incomodidad, ansiedad e inhibición al interactuar en un ambiente controlado.

2. Infórmate bien acerca del puesto y la empresa

La información es la fortaleza ya que conocer más acerca del ambiente en el que te vas a desenvolver te ayudará a eliminar la inseguridad y la incertidumbre de qué pasará.  

3. Prepara las respuestas

Algunas preguntas son inevitables, así que debes prepararte para las más usuales: cómo te ves en 3 años?, cuáles son tus fortalezas y debilidades?, ¿por qué quieres trabajar aquí?, etc. Lo mejor es tener en mente un discurso corto ya que te ayudará a contestar más rápido y esto evitará que te pongas más nervioso.

4.Vístete cómodo pero no olvides el estilo de la empresa

¡Ojo! no siempre debes ser la persona más formal del mundo en una entrevista. Lo más importante es que te sientas cómodo con tu vestimenta para que transmitas naturalidad y confianza; sin embargo tampoco caigas en la informalidad y no olvides el giro y estilo de la empresa.

5. Que el miedo no te paralice

Es normal que en algún punto de la entrevista te quedes sin palabras y el miedo o la inseguridad invadan tu mente. Tranquilo, el que está enfrente es solo una persona de carne y hueso; respira hondo y no te congeles sin decir nada... hablar - de lo que sea- es la mejor manera para que las ideas fluyan y te muestres seguro.

10 PREGUNTAS QUE DEBES HACER EN UNA ENTREVISTA DE TRABAJO

1 ¿Cuántos años lleva funcionando esta empresa?

El 90% de las empresas cierran al cabo de 5 años de vida. Cuanto mayor sea el tiempo que la empresa lleva en funcionamiento, mayores serán las probabilidades de supervivencia, y menor el riesgo laboral a la hora de despedir a sus trabajadores.

2 ¿Cuál es la situación financiera actual de la empresa?

Lo siguiente es comprobar si la empresa es viable financieramente. Aún si la empresa lleva tiempo funcionando, hay que saber si ésta es capaz de seguir financiando su actividad. Si su estructura de ingresos y costes es sostenible.

Hemos visto en los últimos años como la crisis ha provocado el cierre de empresas que llevaban años funcionando, pero cuya gestión financiera, ha sido deficiente. Si la empresa da beneficios consistentemente, tienes otra buena señal de que puede interesarte trabajar ahí.

3 ¿Cuántos trabajadores hay en la empresa?

El tamaño de la empresa es otro de los factores importantes. A mayor número de trabajadores, mayor volumen de ingresos si la situación financiera es buena, y por tanto menor riesgo para el trabajador a la hora de aceptar el puesto.

4 ¿Qué ventaja competitiva tenéis con respecto a vuestros competidores?

Otro factor clave es identificar el entorno en el que la empresa desarrolla su actividad, y quienes son sus competidores. Quieres saber cómo esa empresa se diferencia de sus competidores para saber si tiene probabilidades de sobrevivir a épocas de crisis o a una competencia fuerte en cuanto a precios o escasez de ventas.

Por ejemplo, el sector textil es de los más competitivos del mundo. Empresas como Inditex (la mayor del mundo), son muy seguras, mientras que empresas más pequeñas, parten con desventaja, y pueden cerrar en época de crisis si no tienen una ventaja competitiva.

Preguntas sobre el puesto de trabajo

Lo siguiente es ver si el puesto de trabajo se adapta a lo que tu quieres, en términos de carrera profesional, y estilo de vida. Define tus prioridades, y averigua cómo encajan con ese empleo.

5 ¿Por qué buscan un candidato para cubrir ese puesto de trabajo?

Con esta pregunta pretendes averiguar cuáles son los motivos por los que la empresa no ha cubierto la vacante que tienen. ¿Quizás están creciendo y están contratando gente? ¿O por el contrario la persona que ocupaba ese puesto de trabajo se ha ido porque las condiciones no eran buenas?

Obviamente el entrevistador no dirá nada negativo, pero si la razón que te da no es clara, o la respuesta no es coherente, deberías mantenerte alerta de que las causas podrían ser un mal ambiente de trabajo o condiciones laborales poco atractivas desde el punto de vista de sueldo y carrera profesional.

6 ¿Qué tipo de perfil buscan en el candidato ideal?

Con esta pregunta pretendes conseguir dos cosas: que te den información que no está en la descripción de puesto, en cuanto a habilidades y aptitudes, y focalizarte en aquellos aspectos que más destaquen para hacerles ver que tu perfil es el adecuado.

7 ¿Qué posibilidades de ascenso hay en su empresa?

Como he dicho, cuando escoges un trabajo es muy importante mirar al largo plazo, por lo que quieres asegurarte de que tienes posibilidades de evolucionar. ¿Dónde estarás dentro de 2, 5 ó 10 años si sigues en esa empresa? Las empresas que te ofrecen carrera profesional permiten que cada año crezcas y revalorices como profesional.

Si no tienes posibilidades de ascender, eso es una señal de alarma, ya que cuando una empresa no tiene un plan de carrera definido para sus empleados, significa que no invierte en ellos, porque la empresa asume que son un recurso cuyo coste debe ser mínimo, y tu salario por tanto, también.

Preguntas sobre tus expectativas

Otro aspecto relevante a la hora de realizar preguntas, son las expectativas que tienes sobre el puesto de trabajo. Factores como carrera profesional, formación o el ambiente de trabajo, son fundamentales a la hora de mantener la motivación y el buen rendimiento en tu trabajo. Puedes plantear las siguientes preguntas:

8 ¿Qué opciones de formación hay en su empresa?

Las empresas que dan formación a sus empleados son una muy buena opción para trabajar, sobre todo en los primeros años de tu carrera profesional, donde tu prioridad número uno debe ser aprender, ya que cuanto más aprendes, más revalorizas tu perfil. Además la formación es una forma de retribuir a sus trabajadores, ya que tiene un coste que asume la empresa.

De nuevo, si la empresa no tiene plan de formación, es una señal de alerta, ya que significa que no invierte en sus trabajadores.

9 ¿Qué es lo que retiene a los trabajadores en su empresa?

Esta es una muy buena pregunta, ya que tiene un doble efecto: si el entrevistador no está habituado, le sorprenderá e incomodará. Tendrá que buscar una respuesta rápida, y si no es coherente, él sabrá que quedará en una posición de debilidad frente a ti.

El segundo efecto es que esto a su vez te permite ganar puntos, ya que muestras que quieres establecer una relación de igual a igual con la empresa: puede que ellos te evalúen para ver si les interesas, pero tú también les evalúas a ellos. Esa es la diferencia entre quien entra en una empresa como un ganador, a quien entra como un empleado más.

10 ¿Cómo evalúan el desempeño de los trabajadores y su retribución?

Otro aspecto clave, no preguntas directamente por el salario, pero sí obtienes una respuesta que te permite conocer si tu sueldo tiene posibilidades reales de aumentar a largo plazo de manera constante. Las mejores empresas son las que retribuyen directamente en función del rendimiento del trabajador, y no del resultado de la empresa.

Puedes hacer más preguntas, pero normalmente con hacer 5 ó 6 preguntas de estas 10, le muestras al entrevistador dos cosas:

§ Que eres un profesional que sabes lo que quieres, y por tanto aumentas tu valor frente a él.

§ Que el interés debe ser mutuo. La empresa te evalúa, pero tú a la empresa también.

Cuando preguntes, fíjate en cada reacción del entrevistador, busca posibles incoherencias o puntos débiles de la empresa, y evalúa todo después de la entrevista. Con hacer esto estarás por delante del otro 99% de los candidatos.

Las Entrevistas de Trabajo más Difíciles

El proceso de selección en empresas como Google, Shell, Facebook y P&G consta de una serie de entrevistas telefónicas y personales. La clave está en las preguntas imposibles. Exámenes escritos, adivinanzas, pruebas prácticas, preguntas extrañas, entrevistas individuales y en grupo. Para entrar a alguna de las empresas más importantes del mundo es necesario ponerse a prueba ante una extensa y difícil entrevista de trabajo.

"¿Cuál es el costo marginal de un gigabyte de gmail?"

Le preguntaron en Google a un postulante.

"Cuánta gente usaría una droga que previene la calvicie?"

Fue la pregunta para otro postulante en Boston Consulting Group.

 

Estos son el tipo de desafíos que se enfrentan ante alguna de las 25 entrevistas de trabajo más difíciles, según el ranking elaborado por el portal de trabajo Glassdor, de los Estados Unidos.

 

Las consultoras lideran la lista con McKinsey, Boston Consulting Group y Oliver Wyman en los primeros tres puestos. Un dato que marca la tendencia del ranking es que casi la mitad está compuesto por empresas de tecnología, como Google (9), Facebook (24) y Amazon (25), que son famosas en Silicon Valley por sus duras entrevistas técnicas.

Junto con Shell en el puesto ocho, Procter & Gamble (15) y la de alimentos General Mills (21) son otras de las compañías en la lista, que se confeccionó a partir de más de 80.000 entrevistas realizadas en el último año.

 

Este tipo de empresas tienen procesos de selección con dos o tres entrevistas telefónicas, y si el postulante sigue en camino por el empleo, se puede enfrentar a seis entrevistas personales. Las preguntas pueden, incluso, provenir de los futuros compañeros de trabajo.

Habilidades que no suelen impresionar a las empresas

El CV es el documento decisivo para conseguir que un reclutador quiera dedicar más de 10 segundos en conocer más sobre nosotros, y de ahí radica la importancia que tiene que redactemos y elaboremos un currículum atractivo y acorde a nuestros conocimientos y antiguas experiencias. Pero en ocasiones ponemos información que no aporta ningún interés al seleccionador o indicamos habilidades que no suelen impresionar a las empresas. 

 

Tu primer trabajo

¿Eras bueno paseando perros cuando tenías 15 años? ¿Te sacaste un dinero en el instituto cuidando a tu vecino? Aunque puede que en algún momento de tu vida sea interesante destacar tus primeras experiencias, en un CV profesional es recomendado omitir este tipo de trabajos.

Piensa que lo ideal es que este documento tenga una página, como mucho dos, y por lo tanto hay que saber resumir y destacar lo importante y relacionado con el puesto al que te postulas.

 

Intereses no relacionados

En ocasiones, hay candidatos que incluyen en su CV los intereses que tienen como la música, el deporte, la naturaleza… Este tipo de información no interesa a las empresas ya que en caso de querer conocer en profundidad a un aspirante, lo llamarán para una entrevista de trabajo. Y solo en el caso de que llegue a la siguiente fase del proceso de selección y el reclutador le pregunte, podrá explicar más cosas sobre sí mismo, como por ejemplo sus intereses personales.

 

Notas

Muchos candidatos son partidarios de incluir en el currículum las calificaciones que sacaron a lo largo de su carrera, en un máster, en un curso… Puede que para algunos reclutadores resulte interesante, pero a la mayoría de empresas no les interesa saber qué cifra obtuviste. Las notas no siempre tienen relación con tu real conocimiento sobre una materia o puede contar mucho más la experiencia laboral que luego has tenido sobre un área profesional que una simple calificación.

 

Resumen de tareas

Aunque puede resultar conveniente explicar junto a cada experiencia laboral las tareas que el candidato desarrollaba, tampoco hay que ser demasiado extenso. La capacidad de saber resumir de forma óptima en un CV es complicada pero valorada en muchos seleccionadores, ya que la mayoría prefieren poner grandes bloques de texto perjudicando así el atractivo de este documento. Si el título de la experiencia que incluyes ya indica el puesto de empleo que llevaste a cabo, es suficiente para que el entrevistador se haga una idea de qué sabes realizar.

Adjuntar Diplomas

Si tus habilidades han sido certificadas con numerosos diplomas, está bien que lo indiques con un breve apartado en la parte final del CV, pero no tienes que adjuntarlos cada vez que dejes este documento en una empresa. ¿Cuándo se puede hacer una excepción? Si por ejemplo has realizado varios cursos corporativos de una compañía y quieres cambiar de trabajo pero manteniendo tu puesto en la misma empresa; entonces, sí que deberías adjuntarlos escaneándolos, pero sólo porque quieres evidenciar tu experiencia en un empleo similar.

 

CV "poco profesional"

Hay algunos candidatos que quieren demostrar sus habilidades en diseño, creatividad o informática utilizando su currículum como medio. Es decir, haciendo un documento poco convencional, con tamaños y colores llamativos, usando una infografía en vez de un CV con texto, incluyendo imágenes… Es evidente que un documento que llame la atención a un reclutador puede ayudar al candidato a pasar a la entrevista de trabajo, pero este tipo de habilidades usadas en exceso o siendo mal aplicadas no son del todo recomendadas.

10 cualidades que buscan los reclutadores en las entrevistas de trabajo

Para cada empleo se necesitan unas aptitudes diferentes, pero hay cualidades que son comunes en todos los puestos.

¿Por qué hay un tipo de persona que siempre tiene éxito en todo lo que hace? Seguramente reunirá muchas de estas 10 cualidades que te vamos a mostrar a continuación.

1. Estar seguro de sí mismo sin llegar a ser arrogante.

2. No poner excusas ante los errores. Admitirlos y seguir adelante.

3. Hablar de los logros en plural, teniendo en cuenta al equipo.

4. Ser una persona que busca el equilibro entre el trabajo y la vida.

5. Tener ambición sabiendo que para crecer es necesario el trabajo.

6. Encontrarse tranquilo ante una situación desconocida.

7. Saber coordinar un equipo en ausencia del superior.

8. Reaccionar rápido ante los problemas.

9. No tener miedo a afrontar nuevas experiencias.

10. Flexibilidad en los horarios y lugares de trabajo.

Eso sí, estas cualidades que se demandan de los trabajadores deben ser recompensadas tal y como se acuerdan en la firma del contrato. Ya que si se promete algo que no se cumplirá más tarde, este tipo de cualidades se pueden ir perdiendo con el tiempo. Si el empleado no recibe lo que cree que se merece, puede cambiar completamente su forma de ser en el trabajo. La culpa no será de los reclutadores ni de los que no hicieron bien su trabajo, si no de la empresa que no estuvo a la altura del candidato.

La seguridad es todo lo que nos representa como candidatos ideales para cubrir ciertos puestos, no dejes que tus inseguridades arruinen tu próxima entrevista de trabajo. 

Frases que no debes de decir en una Entrevista.

La regla básica para una entrevista de trabajo es ser tu mismo; y aunque todos cometemos errores en las entrevistas de trabajo, (algunos de ellos sin darnos cuenta), hay algunas frases que debes evitar decir, pues comunican desconfianza, arrogancia, prepotencia y negatividad.

 

“No tengo defectos”

Denota arrogancia y deshonestidad; somos seres humanos y por naturaleza tenemos defectos. Cuando te pregunten por tu mayor defecto, responde con honestidad, seguido de una acción que estés haciendo para trabajar en ello.

 

"Nunca me he equivocado"

Si te piden que cuentes alguna mala experiencia y sobre cómo la solucionaste pero dices que nunca cometes errores, te verás como alguien soberbio y mentiroso. 

 

"Yo ya lo sé todo"

Volvemos a la soberbia y deshonestidad. Tal vez creas que decir que sabes todo te dará pase directo al puesto, pero es mejor que seas honesto y que resaltes tus ganas de aprender cosas nuevas.

“No me gusta trabajar en equipo”

Una de las  competencias más buscadas por las empresas actualmente es el trabajo en equipo, por lo que decir que no te gusta trabajar con gente te resta puntos inmediatamente.

“Mi ex jefe es un %$#@”

 

Hablar mal de tu empresa anterior o jefe causa muy mala impresión. Si no quedaste en los mejores términos, te despidieron o tuviste problemas con tu ex jefe, es mejor que no lo menciones en tus próximas entrevistas.  

 

"No investigué sobre la vacante/ empresa"

No investigar a qué empresa vas o el puesto que deseas ocupar es de los peores errores que puedes cometer.

Muestra poco interés, apatía y pereza. 

La clave está en evitar la negatividad, inseguridad, nerviosismo y apatía; por el contrario, debes mostrar buena actitud, interés y resaltar lo mejor de tu personalidad.