Un vacío en tu currículum no es un agujero negro. Has estado cuidando de tu hijo en casa y todos los días organizabas el tiempo de toda tu familia, tomabas decisiones rápidas, delegabas tareas, gestionabas la logística, solucionabas problemas. ¿Porque no contarlo en una entrevista?
Si te estás preparando para una entrevista, puedes estar segura que una de las preguntas será ¿Qué has hecho durante el tiempo cuando estabas en casa con tu hijo?. Aunque por un lado podemos pensar “¿y qué podría haber hecho en casa con mi hijo?; pues criarlo, esto ya supone un trabajo y todo el mundo debería de entenderlo”. Debería, pero no lo entiende y aún estamos muy lejos de una sociedad idílica que comparte la idea de que la crianza de los hijos es la labor para los padres y no sólo de guarderías ni canguros ni los abuelos. De todos modos más vale estar preparado ante este tipo de pregunta que intentar “inventar” algo en el último momento.
Entonces ¿Cómo responder a esta pregunta? Lo mejor es convertir la respuesta en algo positivo, en demostrar que hemos aprovechado ese tiempo en conseguir nuevas competencias, conocimiento y habilidades. Veamos como hacerlo.
LAS COMPETENCIAS CLAVE
Para empezar, recuerda que para una entrevista hay que prepararse con tiempo, sobre todo si eres mamá y tienes un “agujero” entre las fechas de experiencia profesional. Tienes que tomar conciencia de lo que haya sido para ti ser madre. Piensa qué te ha aportado esta experiencia en tu vida. Qué nuevas habilidades has adquirido y cuáles has desarrollado.
Al principio me centraría en las competencias que has usado día a día. Fíjate que la gestión del tiempo, buena organización, delegar las tareas, ser autosuficiente, la flexibilidad y la rapidez en toma de las decisiones son las habilidades más buscadas por las empresas. Así que ya estás a medio camino al éxito – tienes algo muy interesante para contar.
Hazte una lista de estas competencias y pon ejemplos de situaciones. Siempre es mejor apoyarse con los ejemplos de tu experiencia profesional, pero si además añades situaciones más recientes aunque sean de “casa” no pasa nada. Lo importante es la habilidad que demuestras, no importa tanto en que ámbito porque por ejemplo, si te creas las tablas excel para organizar el menú de la semana o controlar los gastos de la compra, seguramente esta competencias la utilizarás en tu puesto de trabajo.
LOS VALORES VITALES
Pasando el tiempo con tu hijo, seguramente has podido conocerte mejor, descubrir las nuevas “capas” de tu personalidad, de tus intereses y motivaciones. Haz una jerarquía de tus valores y utilízala en la entrevista. Si por ejemplo, hasta ahora, lo más importante para ti ha sido criar a tu hijo y estar con tu familia, ahora igualmente es muy importante para ti tener un trabajo, el contacto con gente, tener una actividad “fuera” de casa para poder aportar tus conocimientos y habilidades (tanto estas nuevas como las que ya habías adquirido antes) en un proyecto motivador. Coméntalo al entrevistador. Tener una jerarquía de tus propios valores y prioridades, dice mucho sobre tu auto conocimiento y que eres consciente de lo que puedes aportar y esto está muy bien visto en el mercado laboral.
¿QUÉ ESPERAS DE UN EMPLEO?
Antes de enviar el CV, recuerda que es muy importante saber qué es lo que estás buscando, cuántas horas quieres dedicar a la vida profesional, de qué manera lo quieres compaginar con la familia, qué es lo que te motiva más en un puesto (ambiente, tareas, sueldo, posibilidad de promoción, formación etc…) Este tipo de preguntas también te las pueden hacer así que piensa ¿para qué quieres trabajar y qué te aporta tener un empleo?
Si estás buscando una estabilidad, buen ambiente y tener muy claras las tareas no te presentes a un puesto en el que se especifica en la oferta que buscan gente dinámica, creativa, flexible y proactiva.
Durante la entrevista las preguntas estarán diseñadas para captar estas competencias y si no es algo que te interese es probable que estas competencias no sean tu punto fuerte.
DEMUESTRA QUE NO ESTAS “FUERA DE MERCADO.
El empleador puede estar preocupado que durante el “break” que te has tomado de la vida laboral, tus competencias se han quedado desactualizadas. Debes demostrar que no es así.
Tal vez sería buena idea que te apuntaras en algún curso online para actualizar tus conocimientos, o también puedes ver si se hacen actividades relacionadas con tu sector o con el desarrollo personal (talleres, seminarios, ferias, charlas etc). Demuestra que no estabas parada. Si no has acudido a ningunas actividades ni has hecho cursos, pues siempre viene bien seguir las noticias del sector (revistas, blogs…). En la era de redes sociales toda la información que queramos la tenemos a la mano. Aprovechémoslo y preparémonos esta parte de la entrevista.
ANALISIS DAFO
Antes de iniciar la vuelta al mundo laboral prepara un DAFO. ¿Qué es DAFO? preguntarás seguramente…..pues es un análisis de tus puntos fuertes, puntos débiles, amenazas y oportunidades. Los puntos fuertes y débiles son las que tienes tu y las amenazas y oportunidades vienen de fuera.
Coge un papel y boli y escribe:
Mis Puntos Fuertes: todo lo que va a favor tuyo – las competencias adquiridas recientemente, tus conocimientos, motivación, situación familiar (por ejemplo tu hijo ya va al colegio) etc.
Mis Puntos Débiles: lo que requiere una mejora y algún trabajo de tu parte, es muy importante saberlo porque es la clave para el desarrollo en todos los sentidos.
Oportunidades: ¿Qué nuevas oportunidades te proporcionará la vuelta al trabajo? Amenazas: ¿Qué dificultará que estas oportunidades aparezcan?.
Durante la entrevista podemos comentar al entrevistador que hemos hecho este análisis para tener claro lo que podemos aportar a la empresa y que cosas debemos mejorar al nivel personal. Esto demuestra que realmente nos la tomamos serio la vuelta al trabajo y hemos tomado el tiempo para preparase para ello.
CONCLUSIÓN
Teniendo elaborado un análisis exhaustivo de nuestra situación actual, estaremos mucho mejor preparadas para enfrentarnos a la vuelta al mercado laboral. No tendremos problemas en responder a la pregunta ¿Y que has hecho durante el tiempo que no trabajabas? y sabremos con que argumentos podremos ganarnos el interés del entrevistador y de la empresa. Además, nuestra autoestima y seguridad en nuestras capacidades aumentará y orgullosas del tiempo que hemos invertido en la crianza de un ser humano y de lo mucho que hemos crecido como personas, transmitiremos serenidad, autoconsciencia, responsabilidad y madurez.
Vale la pena dedicar un par de horas a pensar en nuestra situación actual y en todas las competencias y aprendizaje que hemos adquirido durante la etapa de maternidad. Ser madre es lo mejor que puede pasar a una mujer, creámoslo y convirtamos este periodo del tiempo en nuestro punto fuerte para demostrar lo que la maternidad aporta todos los niveles de la vida personal y profesional.
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